¿CÓMO NOS AFECTA LA INTERNET?

Durante los últimos 4 años, me he notado extraña, siento que no soy la misma, que algo extraño pasa en mi cabeza, es como si a veces la memoria se me escapara, pero como se que eso no puede pasar, me pregunto qué es lo que está modificando mi circuito neuronal.
Ahora me distraigo con facilidad, pienso más lento, soy más insegura, y atenida a lo que puedo encontrar en la web, aunque muchas veces solo sea basura. Debido a mi preocupación, como era obvio busqué en internet, y me encontré con Nicholas Carr quien hace unos años escribió un libro que fue editado en nuestro país: “The shallows” What the internet is doing to our brains? ¿Qué está haciendo internet con nuestras mentes?
El escritor norteamericano, uno de los pensadores más sagaces sobre nuevas tecnologías, parte de una idea fundamental: la disolución de la mente lineal.
Entendido desde el punto de vista de la comunicación social, recordé lo que dijo Marshall McLuhan “el medio es el mensaje” “Lo que se ha olvidado en nuestra repetición de este aforismo enigmático” —escribe— en este caso McLuhan no sólo estaba reconociendo el poder transformador de las nuevas tecnologías de la comunicación. También estaba emitiendo un aviso sobre la amenaza que plantea este poder, y el riesgo de no prestar atención a esta amenaza”. Sin embargo, “ni siquiera McLuhan podría haber anticipado el banquete que nos ha proporcionado internet: un plato detrás de otro, cada uno más apetecible que el anterior, sin apenas momentos para recuperar el aliento entre bocado y bocado”
Entonces, ¿Es el internet un arma de doble filo? Nuestra mente se va perdiendo el enfoque, porque sencillamente el cerebro responde, se adapta, se reestructura, está sometido a cambios, todo en función de nuevos estímulos, de nuevas disposiciones, y de nuevas máquinas.
Todo esto hace que ahora los jóvenes no pensemos igual, es mas, hasta el hecho de conocer cosas con solo hacer “click” y de tener todo a la mano hace que nuestras conductas se modifiquen, nuestro estilo, nuestros hábitos etc y dejamos todo en las manos de un cerebro dominado por la internet.
Ahora, pensando más en la situación puedo afirmar que siento los cambios con mayor fuerza a la hora de leer, de concentrarme en la universidad, antes solía ser más atenta, no me aburría leyendo, los libros me atrapaban y mi imaginación volaba, ahora mi concentración se dispara como un proyectil sin rumbo, ni precisión.